Feelings & Thoughts by Leymig Bonillo

Tengo el camino funestamente perdido entre alegría y llanto ya no se a donde ir, es una persecución ineludible contra traiciones que asechan la lealtad de un verdadero sentir… un sentimiento profanado solo para enaltecer un EGO desquiciado con sed de ruina. Seguí las huellas de tus pasos y me quede perdida en el espacio, sin lugar donde resguardar este corazón herido; entre alegría y llanto no puedo con la pena, fue un 26 de noviembre que pereció esa esperanza que se camuflajió con brillo y me encandilo sin darme cuenta, conduciéndome al mismo abismo pero esta vez sin  vuelta.

Solo el destello de una estrella fugaz fue aquella entelequia, y los instantes de esos tiempos señeros para el recuerdo, soplos que serán plasmados para esos amores clandestinos que se llevaron la esencia de una expectación ingenua…  lazos intensos que dejaron huella en un corazón constipado de un amor mal sano… sufrago desde el elipse de una década que se hallaba perenne, destacando con su ímpetu avasallador de efusión… eso acaecía cuando por esos caminos esas miradas se tropezaban y sin decir palabras todo ese idilio enaltecía los días de esos dos amantes, que permanecían furtivos de un amor agraciado y esos pocos que no se encuentran.

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Fue ese un día triste, ese día donde por última vez tú estarías presente, mi mundo se detuvo en el tiempo y solo quería que tú no fueses, olvide que tenía conciencia y en ese momento entendí todo lo significabas para mí... Se que no estas aquí para quedarte, pero todo lo que me decías permanece allí… Estas brillando en mi destino dirigiendo mi camino y aun cuando estoy en la oscuridad se que me estas protegiendo, todo lo que se es que ese día perdí al mejor padre y por ti permaneceré adelante, no me rendiré porque se que estas conmigo y seré fuerte por que eso me enseñaste, sonreiré porque me lo inculcaste y serás mi ejemplo a pesar que no te palpe… A un GRAN PADRE Gustavo Hernández 06-11-2009