Aloína

Que desconcierto tan grande, estoy en un pantano solo por que quiero, un círculo vicioso se convirtió mi vida, y entre sombras y tinieblas me encuentro, atada y sin salida… Amarrada por ser yo tan masoquista, no tengo razón de ser, no busco estar en mi juicio, soy culpable de mi propio precipicio… Al borde de un gran abismo se encuentran mis sueños, por no querer abrir los ojos, ¡Caigo! ¡Caigo! Tan profundo que no me hallo, en arenas movedizas me estoy hundiendo, y solo por mi tozudez sufro mi agonía sin ningún consuelo… No arranco esto que me esta quemando, calcinando y haciendo cenizas mi calidad de ser humano, estoy siendo vulnerable aquel demonio, que se apropio de mi vida sin ningún reconcomio… Pero cuando ya solo sombras veo alrededor de mi aura, cae del cielo un rayo de luz que mi alma transforma, no todo esta opaco, mi hado esta cambiando, mi suerte se esta volteando, mi despecho se esta acabando… Solo llega la dicha, a pesar de la maldad que me acaricia, ese demonio se esta extinguiendo, solo queda un sin sabor de aquella codicia, y un mal recuerdo de esa terrible desdicha… Ahora mi mundo esta lleno de esperanza, buscando establecer un futuro sin enigmas, junto a ti ángel aloína que me liberaste de ese cautiverio, en donde aquel demonio precedía aislarme, solo por su ególatra enfermiza y su pobre alma marchita, ahora tu eres de mi dueño.